México (Agencias).- El viernes pasado concluyó el primer plazo del programa implementado por los bancos para aplazar el pago de mensualidades de créditos sin cobro de intereses extraordinarios. Los clientes que difirieron a cuatro meses sus deudas tendrán que comenzar a ponerse al corriente desde este mes.
Únicamente entre BBVA, Citibanamex, Banorte, HSBC y Santander, instituciones consideradas de importancia sistémica, suman poco más de 3 millones 342 mil clientes –entre personas y empresas– que tendrán que comenzar a hacer el pago de sus mensualidades con los respectivos intereses ordinarios desde este mes. Dicho programa, diseñado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), tiene como propósito que los clientes de esas instituciones puedan aminorar los impactos de la crisis actual.
Fue lanzado en marzo y la mayoría de las entidades se acoplaron. Consiste en posponer de cuatro o seis meses –según cada banco– el pago de mensualidades sin cobro de intereses extraordinarios o cargos moratorios y tampoco se envía reporte al Buró de Crédito.
Los intereses que los bancos dejaron de cobrar por cuatro meses, según la información oficial, fueron 45 mil millones de pesos.
Cabe mencionar que cinco de los 50 bancos que operan en el país, BBVA, Santander, Citibanamex, Banorte y HSBC, concentran 70 por ciento de la cartera total de crédito de esas instituciones, de acuerdo con las cifras disponibles más recientes de la CNBV.
BBVA México, el banco de mayor presencia, dio a conocer que un millón 300 mil clientes se sumaron al programa de aplazamiento y todos fueron diferidos a un lapso de cuatro meses, según informó Eduardo Osuna Osuna, vicepresidente y director general de la institución.
Rodrigo Kuri, director general adjunto de Citibanamex, dio a conocer que un total de 840 mil clientes se unieron al programa por el lapso mencionado.
En el caso de Santander, 500 mil clientes se adhirieron al plan en el lapso de referencia. Banorte registró solamente a cuatro meses a 610 mil usuarios.
HSBC fue el único de esos cinco que aceptó plazos a seis meses. Los que se suscribieron por cuatro fueron un total de 87 mil 212 clientes.
Todos esas instituciones aseguraron que han comenzado a hacer llamadas a los clientes para informarles que deben comenzar a ponerse al corriente con sus pagos.
La banca aún no tiene dimensionado cuántos clientes podrán hacer frente a los pagos atrasados, pero con el propósito de continuar brindando apoyo y no poner en riesgo la estabilidad de su negocio, anunció que próximamente lanzará un programa de restructura de créditos para cada usuario, de acuerdo con sus necesidades.
Según los bancos consultados por este medio, aquellos que no puedan hacer frente y se suscribieron por un lapso de cuatro meses pueden acercarse a la institución para comenzar a analizar las opciones que cada grupo dará.
Jorge Tello, director de investigación aplicada de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef), aseguró que, en el caso de los bancos, para hacer frente a las posibles afectaciones, deben tener en cuenta las experiencias de crisis pasadas y no otorgar crédito de ahora en adelante de forma irresponsable.
Gabriela Siller, economista jefe de Banco Base, coincidió en ello y afirmó que en bancos estadunidenses se ha notado que incrementaron sus reservas preventivas, con el objetivo de aminorar los impactos por el incumplimiento de pago de créditos por clientes.
Eduardo López, analista financiero de banco Ve Por Más, consideró que es de esperar que los bancos del país, al igual que sus homólogos extranjeros, incrementen sus reservas preventivas, pues hasta el momento las mismas instituciones desconocen la cantidad de personas que no podrán hacer frente a sus deudas.