Por Mario Alberto Estrella.- Desde hace décadas hemos vivido flagelados por nuestras malas costumbres. La corrupción es a su vez crimen y castigo.
De acuerdo a la revista Forbes, a México le cuesta, al menos 100,000 millones de dólares al año la corrupción.
De acuerdo al Índice de Percepción sobre Corrupción que realiza Transparencia Internacional, nuestro país se encuentra en el lugar 105 entre 176 naciones. En el espejo de la corrupción nos vemos igual que Kosovo, Mali, Filipinas y Albania. Del comparativo con los países miembros de la OCDE mejor no hablamos; en la tradición nacional, que existan 71 países peor evaluados es mediana conquista.
La corrupción y el soborno aumentaron 30 por ciento en México en 2018, según una encuesta de la firma PricewaterhouseCoopers (PwC) entre empresarios.
El incremento fue mayor al observado en Sudamérica y América del Norte, donde la percepción arrojó un aumento de 25 y 13 por ciento.
El combate a la corrupción se convirtió en el punto central de la campaña presidencial, a 100 días de gobierno del tabasqueño, nos preguntamos cómo va la lucha contra ese flagelo.
La corrupción, en efecto, es la raíz de muchos de los problemas del país, afirma Eduardo Bohórquez, director de Transparencia Mexicana. Este fenómeno está presente en obras públicas sin concluir, la triangulación de recursos públicos a empresas fantasma, licitaciones irregulares, la operación irregular de taxis, casos de impunidad, gasto de programas sociales con uso electoral y hasta violación a derechos humanos.
Para combatir este mal endémico, AMLO presentó un plan integrado por 50 puntos 15 días después de que los votantes lo favorecieron en las urnas. Entre los lineamientos más destacados estaba la suspensión de fueros y privilegios a funcionarios públicos, reformar la ley para considerar delitos graves el tráfico de influencias, que la Fiscalía general tuviera completa autonomía y la supresión de estructuras y programas duplicados.
A cien días de la operación de su gobierno ¿se puede hablar de un avance en el combate a la corrupción?
Para calificar la gestión de AMLO para disminuir este fenómeno, no es necesario necesario revisar el cumplimiento de las cincuenta propuestas, sino observar la estrategia con la que se abordan casos específicos de corrupción.
En opinión de Bohórquez, la 4t sí está mostrando un cambio de enfoque al abordar los casos de corrupción a través de la Fiscalía General de la República, la Unidad de Inteligencia Financiera a la investigación de casos, así como del Sistema de Administración Tributaria (SAT).
Loretta Ortiz Ahlf, última aspirante de la terna del Ejecutivo Federal para ocupar el cargo de ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), dijo que en caso de ser electa, su prioridad será sostener y promover una política de tolerancia cero frente a la corrupción, el tráfico de influencias y el nepotismo en todos los niveles del Poder Judicial y en los ámbitos de la administración de justicia.
En Tijuana llevan a cabo foro anticorrupción https://www.arribaelnorteabajolacorrupcion.com/
Al desarrollarse el “Foro Internacional Anticorrupción Arriba el Norte, Abajo la Corrupción”, la cónsul general de Estados Unidos en Tijuana, Sue Saarnio respaldó los esfuerzos que se hacen en BC para integrar el Sistema Estatal Anticorrupción.
Por su parte, el presidente del Comité de Participación Ciudadana de Baja California, Jorge Topete Calvario, indicó que aún cuando en muchas entidades del país no está definida la forma en la que participan estos comités con los sistemas estatales anticorrupción, en la entidad se ha avanzado en esta materia a pesar de los desgastes.
“Necesitamos tener más espacios para los ciudadanos, no solamente para los dentro de un Comité de Participación Ciudadana, sino dentro de la decisión de los que integran el Sistema Estatal Anticorrupción, ese es uno de los principales retos que tenemos en Baja California.
López Obrador, anunció que su gobierno presentará una queja formal contra los jueces que liberan con celeridad a presuntos delincuentes argumentando violaciones a derechos humanos o al debido proceso.
Sin embargo, como todo, la corrupción empieza en casa y debe ser combatida desde el seno materno.
Así continuamos, con esa lucha interna, entre el autoflagelo… el crimen y el castigo.