Por Mario Alberto Estrella.- Para la prensa internacional, el presidente de la República es una especie de rockstar, un valiente guerrero que libra una justa divina contra el neoliberalismo.
De acuerdo con la BBC de Londres, Andrés Manuel López Obrador, goza de una enorme popularidad y niveles de aprobación tan altos que sólo se comparan con los primeros meses del gobierno de Vicente Fox, que llegó al poder en el 2000 tras 71 años de gobierno del PRI (Partido Revolucionario Institucional).
Según las distintas encuestas publicadas entre febrero y marzo, la aprobación de AMLO está entre el 64 y el 80%.
“Es una popularidad muy alta. En estos tiempos de redes sociales y de ataques permanentes, mantener tal aprobación es muy difícil y AMLO la ha mantenido hasta febrero”, dice a BBC Mundo Roy Campos, presidente de Consulta Mitofsky, que en febrero le daba 67%.
Sin embargo en casa, las cosas se perciben de manera distinta. Parece que la luna de miel ha terminado y poco a poco las voces de descontento comienzan a encontrar más eco.
Las conferencias mañaneras, que en un principio le sirvieron al mandatario para controlar la narrativa en el día a día de nuestra nación, han pasado a convertirse en una piedra en el zapato, una locomotora fuera de control, un programa de variedades al más puro estilo mexicano. Con la presencia de mariachis e “invitados internacionales” y la ausencia de periodistas de talla, el ejercicio parece haber empezado a restar más que a sumar.
La polémica suscitada en días pasados entorno a las declaraciones de Víctor Trujillo (Brozo), encendió el debate en las redes sociales, logrando mantener la disputa como trending topic durante varios días.
Sin embargo los números no mienten, y ajena al sesgo de las encuestadoras, la tendencia se mantiene a la baja.
Tanto Arias Consultores, como Mitofsky, colocan las acciones de López Obrador a la baja… “un poquito” diría en su particular estilo el Tlatoani.
En su más reciente ejercicio Arias le concede un 45.1 por ciento de aprobación al mandatario, mientras que Mitofsky le otorga un 60.5 por ciento.
Si bien la disparidad de ambos ejercicios es notoria, las dos encuestadoras coinciden en que los bonos de Andrés Manuel van a la baja.
La tracking poll #aprobAMLOmetro es un ejercicio estadístico diario sobre la aprobación o desaprobación de la gestión del presidente Andrés Manuel López Obrador, realizado por Consulta Mitofsky de Roy Campos para El Economista. De acuerdo con Campos, se trata de una medición digital de la función pública.
En menos de quince días la aprobación del presidente Andrés Manuel López Obrador bajó 7 puntos porcentuales y medio, de acuerdo con el sistema de evaluación al presidente titulado AprobAMLOmetro realizado por Consulta Mitofsky.
Los datos publicados señalan que el pasado 14 de abril, López Obrador reportó una aprobación del 67.8 por ciento, mientras que el día de ayer se ubicó en 60.5 por ciento. Casi, casi como en sus tiempos de estudiante universitario.
En el mes de febrero el mandatario contaba con un 73 por ciento de aprobación; sin embargo, los datos comenzaron a descender en marzo registrando un 67.4 por ciento que continuó decayendo hasta abril, mes que cerró con el 62 por ciento.
¿Las razones?
En primer lugar la inseguridad se pasea por México como Juan por su casa. El 76 por ciento de los mexicanos se siente inseguro de acuerdo al ejercicio de Arias Consultores.
“Siguen los asesinatos y las balaceras, pronto puede haber una decepción”, indica Campos de Consulta Mitofsky.
Por otro lado la inflación, las perspectivas de crecimiento y en general los temas económicos parecen haberse puesto en contra del mandatario.
Las expectativas eran demasiado grandes, y cinco meses no son suficientes para enmendar 30 años de malos gobiernos, ya en varias ocasiones he mencionado que un sólo hombre no puede cambiar una nación entera, se requiere del esfuerzo y la voluntad de todos nosotros, más aún que el éxito de ese hombre se encuentra ligado al bienestar de 120 millones de almas.