Mario Alberto Estrella.- El primer turno al bat de Andrés Manuel queda lejos de ser un homerun con las bases llenas.
Cosa que era completamente de esperarse, uno no se cambia de casa sin dejar unos cuantos platos rotos por el camino.
Huachicol, estancias infantiles, medicamentos, vacunas… la lista es demasiado larga para enumerar los desencantos nuestros de cada día.
Y es que los últimos meses, como nunca, hemos estado inmersos en la más grande de las batallas por el control de la opinión pública.
En un esfuerzo por doblar la realidad y hacer cuadrar la narrativa, llegamos hasta desestimar las cifras de crecimiento. Esta semana el quinto hombre más rico del mundo se apersonó en la mañanera para darle un espaldarazo al presidente López Obrador.
Finalmente torció la puerca el rabo dicen en mi rancho.
Carlos Slim, acudió al Show de AMLO donde aseguró que “El crecimiento es intrascendente”. Como se nota que el dinero solo importa cuando escasea.
Así de la nada, el Rey Midas mexicano desestimó con la mano en la cintura el principal indicador de cómo nos va y refrendó su apoyo a la “cuatrote”, quedando implícito también el de el Grupo Blackrock y El New York Times.
“Estoy convencido que vamos a crecer bien y pronto” dijo el magnate.
Poderoso caballero resultó ser Don Dinero, parece que finalmente ambas partes de la ecuación entendieron que hace falta dinero para ejercer el poder y poder para hacer dinero.
Y es que dejando a un lado ideologías hay que reconocer que si le va bien al presidente, nos va bien a todos.
¿Tú qué opinas?
